Sables au sarrasin à l’orange

Introducción

Elabora una deliciosa receta de sables de sarraceno con un exquisito curd de naranja. Esta combinación ofrece un contraste perfecto entre la dulzura cítrica y la textura crujiente de las galletas. Ideal para cualquier ocasión, estos sables conquistarán el paladar de todos.

Ingredientes detallados con medidas

Harina de sarraceno	200 g
Mantequilla	100 g
Azúcar	80 g
Yema de huevo	1
Piel de naranja rallada	1 cucharada
Sal	1 pizca
Jugo de naranja	100 ml
Maicena	2 cucharadas
Huevos	2
Azúcar adicional	50 g

Tiempo de preparación

30 minutos

Tiempo de cocción

15 minutos

Tiempo total

45 minutos

Rendimiento

12 sables

Instrucciones y direcciones detalladas

Paso 1: Preparar la masa Mezcla la mantequilla y el azúcar en un bol hasta que la mezcla esté suave y cremosa. Agrega el huevo y mezcla bien. Incorpora la harina de sarraceno poco a poco hasta formar una masa homogénea.

Paso 2: Refrigerar la masa Envuelve la masa en film transparente y déjala refrigerar durante al menos 1 hora para que esté más firme y fácil de manejar.

Paso 3: Precalentar el horno Precalienta el horno a 180°C (350°F). Mientras tanto, saca la masa de la nevera.

Paso 4: Estirar la masa Coloca la masa entre dos hojas de papel pergamino y estírala con un rodillo hasta que tenga un grosor de aproximadamente 3 mm. Luego, corta las galletas con un cortador de galletas de la forma que desees.

Paso 5: Hornear las galletas Coloca las galletas en una bandeja para hornear forrada con papel pergamino y hornéalas durante 10-12 minutos, o hasta que los bordes estén ligeramente dorados.

Paso 6: Enfriar las galletas Una vez horneadas, retira las galletas del horno y déjalas enfriar en la bandeja durante unos minutos antes de transferirlas a una rejilla para que se enfríen completamente.

Paso 7: Preparar el curd de naranja En un cazo a fuego lento, mezcla el jugo de naranja, el azúcar, los huevos y la mantequilla. Cocina a fuego bajo, revolviendo constantemente, hasta que la mezcla espese.

Paso 8: Montar las galletas Toma una galleta, coloca una cucharadita de curd de naranja en el centro, y cubre con otra galleta para formar un sándwich. Repite con las restantes.

Notas

Nota 1: Almacenamiento Guarda las galletas en un recipiente hermético a temperatura ambiente para mantener su frescura.

Nota 2: Variaciones Puedes añadir ralladura de naranja a la masa para un sabor más intenso o sustituir el curd de naranja por otro sabor de tu preferencia.

Nota 3: Tiempo de preparación Ten en cuenta que el tiempo total incluye el tiempo de refrigeración de la masa.

Técnicas de cocina

Uso del sarraceno

El sarraceno es una alternativa sin gluten que aporta un sabor terroso y un color interesante a las galletas.

Preparación de la crema de naranja

La crema de naranja se prepara cocinando los ingredientes a fuego lento para lograr una textura suave y homogénea.

Enfriado de las galletas

Es importante dejar enfriar las galletas antes de manipularlas para que mantengan su forma y textura crujiente.

Preguntas frecuentes

¿Puedo reemplazar el sarraceno por otro tipo de harina?

Sí, puedes utilizar harinas de trigo o de almendra, aunque el sabor y la textura cambiarán.

¿Cómo almacenar las galletas?

Las galletas deben guardarse en un recipiente hermético en un lugar fresco y seco.

¿La crema de naranja puede hacerse con otro cítrico?

Sí, puedes experimentar con limón o lima para variar el sabor de la crema.

¿Cuánto tiempo se conservan las galletas?

Las galletas se pueden conservar durante una semana en un recipiente hermético.

Conclusión

La elaboración de los sables de sarraceno con curd de naranja es una deliciosa manera de disfrutar de un postre sencillo y elegante. La combinación de sabores y texturas ofrece una experiencia única, perfecta para cualquier ocasión. Invita a tus seres queridos a probar esta receta y sorpréndelos con un toque de originalidad.

Galletas de avena y chocolate

Estas galletas combinan la suavidad de la avena con la intensidad del chocolate. Añade nueces para un toque crujiente.

Tartaletas de limón

Las tartaletas de limón son refrescantes y perfectas para los días de verano. Su relleno ácido contrasta maravillosamente con una base dulce.

Brownies de nuez

Los brownies son siempre un clásico. Agregar nueces aporta un sabor extra y una textura interesante que complementa el chocolate.

Bizcocho de naranja

Este bizcocho es ligero y húmedo, ideal para acompañar con una taza de té o café. Su sabor cítrico es refrescante.

Crêpes de frutas

Prepara crêpes delgadas y rellénalas con tus frutas favoritas. Agrégales un toque de miel o sirope para endulzarlas aún más.